Cristóbal Garrido ha creado y escrito series y pelis como «Amor de madre», «Reyes de la noche», «Lo dejo cuando quiera», «Fariña» o «Cuerpo de élite». Recientemente ha estrenado «Días mejores» en Prime Video. Hoy nos habla de sus hábitos de escritura.
Mi horario favorito para escribir es…
Todo el rato. Por aquello de tener una vida más allá del curro me obligo a escribir en “horario de oficina”. Pero si estoy motivado y a tope con un proyecto, lo mismo te escribo a las 9 de la mañana que a la 1 de la madrugada.
Mi lugar preferido para escribir es…
Cualquier sitio con una buena silla y silencio. Es decir, no soy guionista de Starbucks.
Mi herramienta de trabajo para escaletar es…
Pizarra. Y en cuanto tenemos los pulsos mínimos e imprescindibles por los que pasa la historia, se vuelca al ordenador y a dialogar cuanto antes. No solemos marear demasiado la escaleta. Cuanto antes nos quitemos la versión 0 mejor que mejor.
Mi programa de escritura favorito.
Aunque nuestras pelis las escribíamos con el Final draft, en Bambú nos acostumbramos a usar el Screenwriter y ahora ya tiramos con este para todo. Lo cual es un problema porque todos los equipos de dirección nos piden siempre el archivo en Final.
Releo todo lo escrito en días anteriores…
Por supuesto, cualquier excusa es buena para marear la perdiz.
Mi secreto para concentrarme es…
Quitarme todas las alarmas del móvil y premiarme. ¿Quieres mirar internet? Acaba la secuencia.
¿Escaletar o dialogar?
Me gusta todo. Si trabajas en pareja o en equipo, escaletar implica salir de casa y quedar con gente. Y luego no hay nada más satisfactorio que leer un diálogo, gustarte un poco a ti mismo y a por la siguiente secuencia.
¿Comedia o drama?
Las dos. No entiendo el uno sin el otro. Cuando me enfrento al drama siempre meto momentitos de comedia para romper. Cuando hago comedia, lo pienso siempre como un drama y busco momentos emocionales en el que los personajes sufran más allá de “se caen de culo”.
Lo que más odio escribir es…
Yo es que soy muy optimista y enamorado de mi trabajo. No lo vivo como un sufrimiento o una tortura. Disfruto mucho escribiendo y me siento muy afortunado de tener este curro, pero si tengo que buscarle algo malo: los abogados. He comenzado una pequeña guerra personal contra los clearance. Los abogados leen tu guión y te dicen lo que puedes o no decir. Así que desde hace un tiempo me rebelo. O no cambio chorradas o pido que sean los abogados los que den alternativas creativas y con sentido a los supuestos problemas que señalan. Sigo esperando a que lleguen.
Siempre he soñado con escribir…
Por la capacidad de crear un conceptazo, de sorprender y de no aburrir que tuvieron en las primeras temporadas… En “24”.